Maleno ha declarado durante más de dos horas y según han informado fuentes cercanas a la defensa a periódico digital Público esta nueva citación entraba “dentro de lo previsible” y lo consideran una “buena noticia”, ya que entienden que el juez se está tomando su tiempo para estudiar el caso
La propia portavoz de Caminando Fronteras ha explicado que ha declarado con plenas garantías, que el juez “ha reconocido mi trabajo como labor humanitaria” y que la acusación proviene de un dossier elaborado por la Unidad Central de Redes de Inmigración Olegal y Falsedades Documentales (UCRIF) del Estado español, dependiente de la Policía española
La activista, periodista e investigadora en migraciones y trata de personas Helena Maleno continuará declarando el próximo 21 de enero ante la justicia marroquí por un supuesto delito de favorecer la migración irregular debido a las llamadas de alerta que Maleno realiza a Salvamento Marítimo cuando una embarcación con migrantes se encuentra en aguas del Estrecho.
La propia activista a través de su cuenta de Twitter ha querido agradecer el apoyo de las comunidades migrantes en este proceso judicial.
Maleno ha declarado durante más de dos horas y según han informado fuentes cercanas a la defensa a periódico digital Público esta nueva citación entraba “dentro de lo previsible” y lo consideran una “buena noticia”, ya que entienden que el juez se está tomando su tiempo para estudiar el caso.
La propia portavoz de Caminando Fronteras ha explicado que ha declarado con plenas garantías, que el juez “ha reconocido mi trabajo como labor humanitaria” y que la acusación proviene de un dossier elaborado por la Unidad Central de Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF) del Estado español, dependiente de la Policía española.
El juez marroquí ha informado de que Marruecos no posee pruebas sobre la presunta actividad delictiva de Helena Maleno pero la policía española solicitó a Marruecos que interviniera los teléfonos de Maleno para investigar las llamadas a los servicios de rescate y a los y las migrantes. Tras dos años de escuchas, Marruecos no encontró nada que la incriminase con las redes del tráfico de personas.
